domingo, 8 de julio de 2007

Para juzgar correctamente una obra genial hay tantos puntos de vista que tener en cuenta, tantas circunstancias que comparar, y tanta necesidad de conocer la naturaleza humana, que ningún individuo que no posea el juicio más sólido hará nunca una crítica aceptable de tales obras. Y esta es una nueva razón para cultivar el goce de las artes liberales. Nuestro juicio se reforzará con esta práctica; nos formaremos nociones más exactas de la vida, muchas cosas que complacen o afligen a otros nos pareceran demasiado fríbolas para merecer nuestra atención, poco a poco perdemos está sensibilidad y delicadeza de pasión que tan incomoda resulta.
Pero quizá haya ido demasiado lejos al decir que un gusto cultivado para las bellas artes extingue las pasiones y nos deja indiferentes ante aquellos objetos tan perseguidos por el resto de la humanidad. tras posteriores reflexiones, creo más bien mejorar nuestra sensibilidad para todas las pasiones delicadas y agradables, al mismo tiempo deja la mente incapaz de emociones más rudas y turbulentas.

David Hume.